La aprobación de la ley del "matrimonio gay" nos envuelve a millones de argentinos en una inmensa tristeza y vergüenza. Millones dijimos "no" a esta ley, hecha "entre gallos y medianoches". Sin embargo, nuestros representantes dijeron "sí", en forma atropellada al deseo del pueblo.Oh, sí, ¡cuánta razón tiene la voz del sentido común! Contra incontables millones de argentinos tristes y avergonzados que dijeron "no" con voz cautelosa, vencieron los otros, los no-argentinos, los que sedujeron a nuestros representantes por encarnar el puro deseo, esos a los que llamamos "pueblo". Con la aprobación del matrimonio gay, nos dice la voz del sentido común, no triunfaron los homosexuales, triunfó el "deseo del pueblo", fuerza que atropella. Que así sea.
MEDIODIA DE MIERCOLES
Hace 1 día.
2 comentarios:
Amén. Que sea pueblo.
la moral argentina es la de regodearse frente a los detalles en los casos de pedofilia que cometen los curitas buenos y echar un grito cual libertarios cuando se decide reconocer derechos y hacer justicia terrena, asquea bastante.
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